Un encargo aparentemente sencillo que constaba en reformar una habitación-sala de una masía situada en medio del bosque, en un entorno privilegiado.
La estancia ya tenía un encanto natural, sin embargo había unas vueltas catalanas que no lucían y el espacio era frío y poco acogedor. La transformación se ha hecho jugando con diferentes materiales como la madera natural – que aporta calidez – y la laca que aporta un toque más moderno en los armarios y paneles de la pared.
Hemos recuperado una pared de piedra que nos da naturalidad y marca la diferencia entre la sala y el dormitorio. En la parte del dormitorio hemos añadido un mural que da un toque de romanticismo a la habitación.
El resultado final ha sido una estancia espectacular que ha gustado mucho a nuestros clientes.